Cuidados y consejos para el Aloe Vera
El Aloe Vera es de la familia de las liliáceas y está relacionada con otros miembros de la familia de los lirios, tales como la cebolla, el ajo y el nabo. Muy conocida por todos los beneficios que tiene y es un accesorio decorativo perfecto para interiores.
Respecto a sus cuidados es ideal para principiantes y primerizos, ya que si se te olvida regarla en una semana ¡No pasa nada!
¿Cómo mantener a tu Aloe Vera sano dentro de casa?
Temperatura → Le gusta el clima cálido y las condiciones secas. Odian el frío Pueden arrugarse hasta morir si las expones directamente al frío.
Agua → No regar más de una vez a la semana puede ser contraproducente, recordemos que es una suculenta y les gusta tener la tierra seca. La planta solo tomará el agua que necesita y lo demás lo va a drenar, siempre y cuando tenga el sustrato correcto. Si la estás regando demás lo podrás notar a través del color de sus hojas o tallos ya que cambian a color café o negro.
Luz → Se adapta fácilmente, puede recibir desde luz del sol directa a poca luz indirecta como en una habitación o baño de tu casa. Poco a poco notarás si tu Aloe Vera está feliz en donde la pusiste. Algunas veces si recibe luz de sol directa o hace mucho calor pueden llegar a ponerse cafés o negras las hojas o tallos.
¿Cómo sé si mi Aloe tiene alguna enfermedad?
Existen dos tipos de enfermedades que puede llegar a tener tu aloe, te compartiremos algunas formas de identificarlas:
Hongos: Daños notables como manchas blancas o amarillentas sobre la cara superior de la hoja evolucionando a lesiones color marrón. Si persisten estas condiciones aumentará el número de daños hasta descamar todas las hojas. Existen otros hongos que pudren el tallo en donde nacen las raíces.
Bacterias: Putrefacciones que comienzan a pintar las hojas de color amarillo en las hojas más antiguas, produce un olor desagradable y puede morir tu planta entre 8-10 días tras el primer síntoma.
¿Cómo me deshago de las plagas de mi Aloe?
Las plagas más comunes son causadas por pulgones, ácaros, mosca blanca y escarabajos molineros o harineros.
Debemos podar las hojas marchitas, amarillas o afectadas gravemente por estos insectos.
Irrigar con un chorro de agua a presión para eliminar los insectos restantes.
Algunos se diseminan por el sustrato, por ejemplo, los mosquitos del hongo, por lo que si la planta se encuentra en una maceta debemos retirar las demás plantas que no estén contaminadas. Podemos retirar los insectos remanentes de tallos y hojas con un hisopo de algodón (como un bastoncillo). Una vez realizado esto, colocamos una cinta adhesiva cerca del aloe para atrapar los insectos.
¿Cómo corto las hojas o penca de mi Aloe Vera?
Para cortar las hojas o penca sin dañarlas, debemos seleccionar una hoja de las que se encuentran afuera y más cercanas a la base, esas son las pencas más viejas y tendrán más gel.
Hacer un pequeño corte con un cuchillo, tijeras o herramientas de jardinería limpias en uno de los laterales de la base de la hoja, donde se une al tallo y jalar hacia el lado contrario de donde se realizó el corte hasta separarla por completo. Debes ser cuidadoso para no dañar tu Aloe.
¿Cómo sacar el gel de la planta?
Al cortarla verás que saca un compuesto amarillento, se le conoce como aloína, deberás eliminarlo por completo lavando cuidadosamente la hoja o tallo, después:
- Cortar la punta de la hoja que es la parte con menos concentración de gel.
- Eliminar los bordes laterales con espinas
- Cortar la base de la hoja.
- Por último eliminar las caras ventral y dorsal.
De esta forma, nos quedaremos únicamente con el gel.